La Iglesia Ortodoxa “San Nicolás” tiene sus raíces en la comunidad rusa y eslava de la región. En octubre de 1952, el Vicepresidente de la Asociación Templo Ortodoxo Ruso, señor Miguel Uskov, presentó ante un Juez de Paz los estatutos fundacionales de la Asociación, dando inicio al proceso formal de legalización de la propiedad del templo. Desde entonces, la Iglesia ha sido un pilar espiritual para sus fieles, creciendo en número y consolidándose como un espacio de encuentro, culto y preservación de las tradiciones ortodoxas en la zona. Actualmente, la Iglesia Ortodoxa “San Nicolás” continúa recibiendo una numerosa comunidad de creyentes que mantienen viva la fe y la cultura ancestral, brindando además actividades religiosas, culturales y sociales que fortalecen los lazos comunitarios.