La Avenida Costanera Padre Bolik fue el primer tramo de costanera inaugurado en la ciudad de Encarnación, marcando el inicio del proceso de transformación urbanística de la capital de Itapúa. Habilitada en el año 2010, cuenta con aproximadamente un kilómetro de extensión y se posiciona como un punto clave de esparcimiento, actividad física y conexión con la naturaleza. Esta costanera ofrece una infraestructura pensada para el disfrute de toda la familia: sendas peatonales, ciclovía, espacios verdes en constante crecimiento, bancos para descanso con vista al río, y una avenida de doble sentido para el tránsito vehicular. Además, es escenario frecuente de ferias de artesanía, actividades recreativas y eventos culturales al aire libre. Uno de sus distintivos más valorados es el sector destinado al desembarco de lanchas y embarcaciones menores, lo que la convierte en el sitio predilecto para los amantes de la navegación y los deportes acuáticos. En este tramo también se ubica la oficina de Turista Róga, un centro de atención al visitante donde se brinda información, orientación y material turístico. A lo largo de la avenida, se han desarrollado diversos emprendimientos hoteleros y residenciales, destacándose edificios modernos que realzan el paisaje urbano y ofrecen vistas privilegiadas del río Paraná. La Costanera Padre Bolik es, sin dudas, uno de los espacios más representativos del nuevo perfil turístico y urbano de Encarnación, un lugar donde la ciudad se encuentra con el río en perfecta armonía.
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