La iglesia catedral de Villarrica recibe su nombre por ser la sede del Obispo, quien allí tiene su cátedra. En su interior se encuentran varias imágenes sagradas, entre ellas, la figura de la Paloma en el retablo mayor, que simboliza al Espíritu Santo, actual titular de la Catedral, la Parroquia y la Diócesis. También se destacan las imágenes del Sagrado Corazón de Jesús, San Francisco de Asís y San Roque González de Santa Cruz, tras la designación del Espíritu Santo como titular en 1987. La iglesia sigue el rito romano y es la iglesia madre de la Diócesis de Villarrica del Espíritu Santo. Su estructura actual, concluida en 1891, incluye una torre con reloj y tres campanas cuya melodía puede escucharse a 2 km. En su interior conserva un retablo de madera original de la época franciscana, así como reliquias del Papa Juan Pablo II y de la beata Chiquitunga