Capital del departamento homónimo, Caazapá fue fundada en 1607 por Fray Luis de Bolaños bajo el nombre de San José de Tebicuary. Su nombre actual proviene del guaraní Ka’aguy jehasapá, que significa “pasando el monte”, en alusión a la creencia de los guaraníes de que más allá de la selva, con la dedicación del fray, Dios había creado una nueva tierra. Reconocida como la reducción franciscana más importante del Río de la Plata, Caazapá conserva en su casco histórico vestigios de aquella época, con construcciones coloniales que aún evocan su pasado. Entre sus joyas patrimoniales destaca el Templo de San Pablo, edificado durante la misión franciscana, cuyos retablos originales superan los 300 años de antigüedad. Uno de los sitios más emblemáticos de la ciudad es el Ykuá Bolaños o Manantial de Bolaños, lugar cargado de historia y leyenda, donde se dice que el fray hizo brotar agua de una piedra. Sorprendentemente, este manantial continúa fluyendo hasta hoy, símbolo de fe y esperanza para los pobladores. Cada mes de enero, Caazapá se viste de fiesta con el Festival del Ykuá Bolaños, uno de los más grandes del país. El evento reúne a más de 15.000 visitantes que disfrutan de música tradicional, danzas folclóricas, artistas nacionales e internacionales y todo el colorido de la cultura paraguaya. La ciudad mantiene viva su herencia histórica con sus casas coloniales, el Oratorio San Roque y su ambiente tranquilo que invita a descubrir las raíces espirituales y culturales del Paraguay profundo.