Caaguazú, conocida como la “Capital de la Madera”, se encuentra a 190 km de Asunción y es una de las ciudades más dinámicas del interior del país. Su nombre proviene del guaraní Ka’a Guasu, que significa “hierba o selva grande”, evocando los extensos bosques que alguna vez caracterizaron la región. Aunque comparte nombre con el departamento al que pertenece, no es su capital, situación similar a la de otras ciudades paraguayas como Paraguarí, Concepción, San Pedro y Caazapá. La ciudad tiene sus orígenes en 1845, cuando once familias se asentaron en las cercanías de los manantiales que hoy conforman el Ykua La Patria, un emblemático parque turístico donde los visitantes pueden descansar bajo la sombra de añosos árboles y disfrutar de un entorno natural. Con el tiempo, el desarrollo comercial, impulsado en gran medida por el sector privado, consolidó a Caaguazú como un polo atractivo para empresas inmobiliarias, hoteleras y de servicios. El título de “Capital de la Madera” se debe a la fuerte tradición en carpintería y ebanistería, con talleres que producen desde muebles de alta calidad hasta artesanías en madera. Muchos de estos establecimientos se encuentran en la entrada al casco urbano, a lo largo de la Ruta PY07, y se han convertido en una parada obligatoria para quienes desean adquirir piezas únicas. Caaguazú es también una ciudad joven y en constante crecimiento. El establecimiento de varias universidades ha generado un ambiente estudiantil vibrante, complementado por un activo movimiento nocturno en bares y pubs. A nivel deportivo, se destaca por contar con el Polideportivo Techado más grande del Paraguay, con capacidad para más de 7.000 personas, considerado el único “domo” del país y sede de importantes eventos deportivos y culturales. En el ámbito religioso, la ciudad tiene como patrona a la Inmaculada Concepción. Su iglesia principal llama la atención por el imponente mural de su fachada, obra de un reconocido artista argentino que también dejó su legado en diferentes puntos del territorio nacional. Hoy en día, Caaguazú combina historia, tradición y modernidad, ofreciendo a sus visitantes una experiencia que abarca cultura, naturaleza, artesanía y hospitalidad. Es un destino ideal tanto para quienes buscan descanso como para aquellos interesados en el turismo cultural y de eventos.