El 3 de mayo es una fecha que en el Paraguay ha tomado rótulo de
tradición. Se trata del Kurusú Ara o Día de la Cruz, cuya exaltación se remonta
a la época de la evangelización franciscana.
El pueblo fue transfiriendo por generaciones la devota veneración
de la Cruz y le agregó formas propias para compartir su fe.
Muchas familias preparan en esta fecha una suerte de pesebre hecho
de follajes. En el centro se coloca la Cruz, la escena se completa con
abundante cantidad de chipas de diversas formas y rosarios hechos de maní que
se cuelgan de las ramas a manera de ofrenda familiar y se dejan a disposición
de quienes llegan a manifestar su devoción mediante un acto de fe.